El deporte en las primeras edades debe entenderse como una actividad más que va a ayudar a la formación de los alumnos y alumnas de Primaria. Esto quiere decir que debemos huir de planteamientos elitistas donde sólo los mejores tienen cabida en la práctica deportiva. Este tratamiento necesariamente educativo del deporte en estas edades no debe ir en contra de un proceso de enseñanza-aprendizaje correcto donde todos los jugadores vayan mejorando en la medida de sus posibilidades. Desde este punto de vista es necesario estudiar y profundizar diferentes ámbitos de la práctica deportiva:
Características básicas del deporte educativo
Para poder utilizar el deporte como un contenido más en la formación motriz del alumnado en la escuela, éste debe cumplir una serie de características que le harán ser un buen instrumento educativo. Contreras (1989) estudia el deporte educativo y la aplicación de la iniciación deportiva en Primaria estableciendo que el deporte no es educativo por sí mismo, sino que será la metodología que utilicemos en su enseñanza, las condiciones en las que se desarrolle, lo que hará que nos pueda servir como medio de formación. Será el profesor el que liberará al deporte de sus características no educativas como el elitismo, la falta de coeducación, la excesiva importancia del resultado o la especialización temprana para que pueda ser utilizado como un contenido educativo en nuestras clases de E.F. Díaz Suárez (1995) añade que el deporte bien utilizado nunca se podrá poner en duda como medio educativo, de recreación o esparcimiento y para acrecentar o mantener la salud. Gutiérrez (1998) añade que el deporte será educativo o no en función de cómo el educador oriente esa actividad y cómo organice las experiencias motrices, cognitivas y afectivas que caracterizan cada actividad deportiva.
En definitiva, los profesores o entrenadores vamos a ser los responsables principales de que la práctica deportiva se desarrolle de forma más educativa. Para ello, el M.E.C. (1989) propone los siguientes principios:
Elementos básicos que intervienen en la enseñanza del deporte
Aunque son muchos los posibles elementos que pueden influir a la hora de enseñar el deporte durante la etapa escolar, nosotros hemos seleccionado cuatro que nos parecen interesantes, fáciles de entender y de aplicar con nuestros alumnos: el tipo de deporte que practicamos; la relación de este deporte con los mecanismos de percepción, decisión y ejecución; la importancia que va a tener la técnica y la táctica en función de la relación anterior; y, por último, la forma de enseñar que se plantea en función de los tres elementos enumerados.
Tipo de deporte
En general se suele plantear una metodología similar en la docencia del deporte en edades de iniciación, pero en realidad deberíamos analizar el tipo de práctica que desarrollamos con objeto de adecuar nuestra actuación a la especificidad de esta. Hernández Moreno (1994) realiza una clasificación sobre el deporte atendiendo a la presencia o no de compañeros y adversarios y que nos sirve para realizar posteriormente este análisis.
Relación con las fases del acto motor
Las fases de cualquier acto motor son definidas por Mahlo (1981) como análisis y percepción de lo que sucede, decisión y ejecución. En función del tipo de deporte que practiquemos tendrán más o menos importancia alguna de estas fases y, por tanto, habrá que tenerlo en cuenta en el desarrollo de nuestros entrenamientos a la hora de diseñar las sesiones y las actividades.
Importancia de la técnica y la táctica
En estrecha relación y vinculación con el apartado anterior desarrollamos brevemente la importancia de dos elementos imprescindibles en la enseñanza de cualquier deporte: la técnica y la táctica. Queremos dejar claro que estos dos elementos han de ser tenidos muy en cuenta en el aprendizaje de cualquier deporte, pero que no en todos tienen la misma importancia. La enseñanza de la técnica en todos los deportes está mucho más vinculada con el mecanismo de ejecución, mientras que la táctica se relaciona mucho más con los mecanismos de percepción y decisión.
Desde esta perspectiva, la técnica tendrá una mayor importancia en los deportes psicomotrices y los de colaboración analizados ya anteriormente. Por otro lado, la táctica tendrá mayor importancia en los deportes de cooperación-oposición y los deportes de oposición (López y Castejón, 1997). Esto no quiere decir, ni mucho menos, que la técnica no sea necesario trabajarla en los deportes donde existe oposición, pero sí que se desarrollará en situaciones reales similares a lo que ocurre en la realidad del juego.
Estrategias a utilizar
Como resumen y aplicación de los tres apartados anteriores, nos vamos a atrever a continuación a enunciar algunas pautas metodológicas muy simples sobre la utilización de estrategias, técnicas y estilos de enseñanza.