Introducción
Las figuras de cuerda o string-figures han existido desde la antigüedad, parece que su origen proviene del Extremo Oriente, gente de diferentes culturas y civilizaciones han creado figuras de cuerda a lo largo de la historia, encontrándose figuras idénticas en zonas enormemente alejadas del planeta. Se encuentran en África, India, Nueva Zelanda, Nueva Caledonia, Nueva Guinea, Costa de Oro, Australia, Islas Marquesas y de la Sociedad, Fidji, Yoruba, Guayana Inglesa, Palau, Isla Sandwich (Hawai) y se juega en toda América.
Se practica entre muchas tribus primitivas, las que son asombrosamente expertas y forman lazadas extraordinariamente complicadas, ayudándose con los labios, dedos de las manos y de los pies. Se usaban para ilustrar las historias que se contaban en torno a la hoguera del campamento, para describir fenómenos naturales, animales...
Estos juegos han llegado hasta nosotros gracias a la labor de antropólogos y estudiosos que se han encargado de recopilar estas figuras y describir sus instrucciones mediante una terminología específica, esta se unificó en 1898 gracias Haddon y Rivers, creadores de los términos que se utilizan en la actualidad para describir los pasos para realizar las figuras.
Existe una institución llamada Internacional String Figure Association (ISFA), que se fundó en 1978 por Hiroshi Noguchi, un matemático japonés y Philip Noble, un misionero anglicano destinado en Papua Nueva Guinea. Su principal meta es reunir, preservar y enseñar las figuras de hilos o cuerdas a las futuras generaciones, para que aprendan y disfruten de este antiguo juego. Según ellos es una manera saludable, barata para relajar la tensión y olvidarse de los problemas. El único requisito es el entusiasmo y sentir pasión por hacer las figuras de cuerdas.
Nuestro objetivo es rescatar del olvido juegos ancestrales que han sobrevivido al paso del tiempo y adaptar figuras de cuerda que normalmente son individuales a un grupo.
Qué trabajamos con figuras de cuerda colectivas
Son muchos los aspectos que se desarrollan al realizar estos juegos, nos gustaría destacar el factor cultural dentro de que la mayoría existen desde hace muchos años, muchas de las figuras acompañan a historias fantásticas. El desarrollo de la memoria que me obliga a recordar los movimientos de forma ordenada para conseguir finalizar con éxito la figura. Fomentan la abstracción al deber sustituir dedos por jugadores y estos hacer los movimientos que corresponderían a los primeros. El trabajo cooperativo que hace fundamental el papel de cada jugador, favorece el diálogo entre todos y la discusión sana para obtener el éxito del grupo.
En el campo motriz desarrolla la percepción espacial en torno a la cuerda y la temporal, ya que los movimientos deben corresponderse a una secuencia preestablecida.
Obliga a los jugadores a desarrollar su control segmentario, la lateralidad y manipulación. La coordinación y el equilibrio dentro del grupo se hace fundamental y una vez dominadas las figuras pueden establecerse coreografías rítmicas acompañadas de canciones.
En el ámbito expresivo podemos destacar la creación de historias y la representación de dicha historia mediante movimientos conjuntos que llevarán a la figura final.
Figuras propuestas
La estrella de cinco puntas
Esta figura representa una estrella de cinco puntas, fue recogida por David Titus en la tribu yupik en Alaska. Para poder realizarla correctamente necesitaremos un cordel pequeño de medio span o bien un cordel de 1 span doble.
La tortuga
Figura recogida por Dickey en 1928 en Maui y Kauái. Ensalza la importancia que los nativos dan a la puesta de huevos de las tortugas marinas en sus playas. Tamaño de cordel 1 span. Se acompaña de una canción:
Maeaea del nui del honu de O
Mai del ana del hele de ka del mai de Mai Kahiki
O Kahiki ula.
Tortuga del Oh grande y de gran alcance
Venido de Kahiki aquí
Rojo Kahiki del Oh.
Cuna de gato